jueves, 9 de septiembre de 2010

Agradecimientos al Maestro

Este lunes 6 de septiembre, en México D.F. falleció el Maestro José Marcelli Noli.
Según los testimonios de parientes e hijos, el Maestro se fue en profunda paz.

Para mi, un verdadero honor haberlo conocido, sólo puedo sentir un profundo agradecimiento de haber compartido algunos momentos con el, para mi esos momentos fueron muy especiales y mágicos.
Siempre voy a recordar cuando lo conocí, yo era Yamin y estaba pintando una sala del Centro Cultural Inti-Raymi, la casa sede de la RedGFU en Concepción, teníamos organizadas una serie de actividades con el y era la primera vez que iba a conocer un Maestro de Iniciación Real, así que estaba yo muy ansioso. Su llegada se adelantó, lo que nos pilló a todos medio de sorpresa, de hecho llegaron del aeropuerto, y yo todavía estaba retirando y limpiando los restos del trabajo, la casa oliente de pintura fresca. Desde adentro, por la ventana, lo vi bajando de su auto junto con Rosita su esposa, y se quedó mirando los afiches que habíamos hecho. Yo apenas alcancé a lavarme las manos y la cara, y me fui a la recepción y ahí estaba, mirando los afiches y las cosas que teníamos pegadas en el mural. Debe haber visto mis dudas de acercarme, así es que se adelantó con una gran sonrisa y su mano extendida y me dijo: "Hola, Soy José Marcelli". Nos estrechamos las manos. Luego todo continuó en un clima de mucha armonía y distensión, a pesar del nervio que teníamos los que lo estábamos recibiendo. Entre algunas cosas dijo que ya estaba acostumbrado al olor de pintura, y que le parecía bien, porque así por lo menos sabía que se pintaban las casas de vez en cuando, por lo menos cuando llegaba un Maestro. Cuando estuvo conectándose para bajar sus correos yo le estuve ayudando, algo no sabía que para mi era muy sencillo, cuando se lo dije, me miró con los ojos brillosos, cómo si me hubiera reconocido, se palmoteó la cabeza y dijo, "pero que tarado que soy", yo contento de poderlo ayudar.
Fueron unos días muy especiales para mi, hicimos algunas actividades ahí mismo en el Centro Cultural y algunos días de Vida de Ashram en un hogar de padres jesuitas, yo lo atosigué con cuánta pregunta se me venía a la cabeza, incluso cuando ya se estaba subiendo al vehículo para irse, el siempre dispuesto a responder.

Ahora hace bastantes años que no lo veía, la última vez lo vi en una Reunión mundial en Argentina. Se comentaba que físicamente estaba un tanto deteriorado, pero muy lúcido, por lo que se ve en las fotos más recientes, bien abuelito se veía pero con ojos de niño, ojos brillosos, ojos expectantes, ojos de alguien que se maravilla de todo.

La muerte de el debe haber sido una muerte conciente, quizás ahora está conociendo lo que está mas allá de esta dimensión en la que estamos, pero todo eso no son más que elucubraciones mías, lo importante es todo lo que nos dejó a los que tuvimos la suerte de conocerlo.

Como decía antes, yo contento y agradecido de haberlo conocido, de haber visto la gran congruencia entre lo que decía y cómo lo vivía, sus palabras resuenan en mi y creo que son como semillas esperando despertar y brotar.

Infinitas Gracias Maestro por toda una vida de entrega y tantos ejemplos de cómo vivir, descubrirnos y ser felices.

Buen viaje.

P.D: La foto es un agradecimiento hecho por Paloma Zamora.

2 comentarios:

Annie Vásquez dijo...

Pocas horas después de la noticia vi en el Facebook de mi buen amigo Luis frases que me removieron en lo profundo del ser. Estuve tentada a colocar algunas mías que revelaran mi sentir al conocer algo del Maestro y mi sentir ante su partida, pero no lo hice.
Hoy al terminar de leer las líneas del Blog siento lo bello que debe ser existir y dormir sabiendo lo que nos toco vivir y ser capaces de tocar a otros con eso del cual nos dimos cuenta y perdurar en Ellos.
Seguimos en la busqueda aún... pero es reconfortante tener algunas pautas logradas por seres como Marcelli.

konatufe dijo...

Gracias Amiga.